Una ola ciudadana de corazones verdes

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- Como respuesta a la crisis sanitaria y social que estamos atravesando, la plataforma #PlanDeChoqueSocial, de la que forman parte más de 400 organizaciones sociales y ambientales, entre ellas Ecologistas en Acción, impulsa la campaña ‘Pinto un corazón verde’ para reivindicar unos servicios 100 % públicos, universales y de calidad.

- Decenas de personalidades de la cultura, la música y la comunicación, así como profesionales de los servicios esenciales, se han sumado a la campaña #PintoUnCorazónVerde y animan a la población a colgar un corazón verde en sus balcones, ventanas, centros de trabajo, hospitales, escuelas o medios de transporte.

- La campaña exige que se reviertan los recortes y las privatizaciones que en los últimos años de austeridad han colocado a España muy por debajo de la media de la UE en gasto social y, por lo tanto, en una situación más vulnerable ante la crisis.

«Los servicios públicos están a nuestro lado desde que nacemos y nos acompañan en toda nuestra vida. Garantizan derechos fundamentales como la educación, la salud o la protección social. Por eso, cuando recortan servicios públicos, recortan nuestras vidas , nuestra dignidad». Así comienza el manifiesto de la campaña ciudadana Pinto un corazón verde, con la que cientos organizaciones sociales, profesionales de los servicios esenciales y rostros conocidos invitan a la población a exigir unos servicios 100 % públicos, universales y de calidad pintando un corazón verde en sus ventanas.

La campaña #PintoUnCorazónVerde quiere denunciar que la crisis sanitaria y social provocada por la enfermedad COVID-19 ha evidenciado que los recortes y privatizaciones de los servicios públicos experimentados en los últimos años, tienen consecuencias devastadoras. España está por debajo de la media de la UE en gasto sanitario (-1,1 %), educativo (-0,7 %), de protección social (-1 %), o de vivienda (-0,1 %) y otros gastos necesarios, como los de la lucha contra la violencia machista o la pobreza infantil, sigue n estando lejos de lo necesario para abordar estos problemas.

En el caso de la sanidad pública, entre 2010 y 2017 España perdió más de 12.000 camas de hospitales a pesar del aumento de la población. La falta de recursos en esta crisis no es casualidad, España ocupa el vigésimoquinto puesto de la UE en camas por con 243 camas por cada 100.000 habitantes, cuando la media europea es de 372 camas por cada 100.000. Recortes que también se notan en personal cualificado. Por ejemplo, el personal de enfermería, dedicado a tareas esenciales como el cuidado de los pacientes, ocupa el puesto 18 de los 23 países con datos de la UE. La propia Comisión Europea advertía con su informe State of Health in the UE. España de 2019 la importancia de estas cifras y cómo una gran parte de las y los profesionales sanitarios tienen contratos temporales, lo que aumenta la tasa de rotación del personal y con ello las dificultades.

No solo los recortes, también el proceso de privatización de la sanidad pública impacta en la falta de recursos, ya que los conciertos público-privados han derivado parte del gasto sanitario a beneficios empresariales. Un ejemplo es la Comunidad de Madrid, una de las regiones donde más ha impactado el virus y que a la vez ha sufrido más privatizaciones en los últimos años, como han denunciado repetidamente los profesionales. Según el Servicio Madrileño de Salud, de 2010 a 2018 la región perdió unos 3.300 profesionales, mientras que la población con derecho a la asistencia sanitaria creció en casi 500.000 personas en ese periodo.

La infradotación no sólo en hospitales, también de residencias de mayores, ayudas a la dependencia o la precariedad de los servicios sociales, han dificultado la actuación ante una emergencia ya no solo sanitaria, sino social y alimentaria. Por eso desde la campaña se denuncia que los profesionales han trabajado con una falta de seguridad absoluta. «La pandemia está siendo especialmente cruda en las residencias de mayores, un sector altamente privatizado (en torno al 85 % son residencias privadas, algunas en manos de fondos de inversión) en el que se lleva años denunciando el mal estado de las instalaciones y la situación del personal, escaso, saturado y mal remunerado. De hecho, la Fiscalía investiga a 38 residencias de España, 19 de ellas en Madrid, donde se ha producido la mayor mortandad (en torno al 70 % de las muertes por COVID-19 de la región)», citan.

Para la plataforma ciudadana #PlanDeChoqueSocial, compuesta por más de 400 organizaciones y colectivos sociales, es el momento de apostar «por un futuro que cambie el presente, y por un futuro para nuestras vidas con dignidad para todas las personas». Se trata, afirman, de poder afrontar esta pandemia y las futuras que puedan llegar, de la mejor de las maneras. También se trata «de no dejar a nadie atrás» en esta crisis social y económica que acaba de empezar.

Apoyo de rostros famosos y sectores esenciales

En su lanzamiento la campaña #PintoUnCorazónVerde ha recibido el apoyo de más de una veintena de personas representativas del mundo de la cultura, la comunicación y la música. Aitana Sánchez Gijón, Amparo Sánchez (Amparanoia), Ana Pardo, Anita Kuruba, Antonio de la Torre, Bob Pop, Carlos Bardem, Cristina Fallarás, Fernando Tejero, Gorka Otxoa, Irene Anula, Juan Diego Botto, Lamari (Chambao), La Otra, Magda Bandera, Nacho Vegas, Nathalie Poza, Olga Rodríguez, Rozalén, Sergio Peris y Toni Mejías (Los Chikos del Maíz), son algunos de los nombres que se han sumado a pintar un corazón verde por los servicios 100 % públicos.

Asimismo, trabajadoras y trabajadores de los denominados sectores esenciales han querido sumarse a la convocatoria. Personal sanitario, de limpieza, de transporte, servicios sociales o de residencias de mayores son algunos de los rostros que se han participado. También agricultoras, agricultores, ganaderos, transportistas y personal del pequeño comercio alimentario. Todas estas personas son quienes, según la plataforma #PlanDeChoqueSocial, viven en su propio trabajo diario la precarización de los servicios esenciales y quienes realizan los trabajos realmente imprescindibles para poder vivir.

Las entidades sociales de esta red invitan a la ciudadanía a colgar, a partir de hoy, un corazón verde en sus balcones, ventanas, centros de trabajo, hospitales, centros de salud, despensas o bancos de alimentos, colegios… y hacerse un vídeo o una foto y utilizar la etiqueta #PintoUnCorazónVerde. Sean famosas o anónimas, las cientos de personas que impulsan esta campaña coinciden en que «de esta crisis solo podemos salir si reforzamos los servicios públicos, universales y de calidad, sin privatizaciones. No queremos recortes nunca más».

Estamos ante una crisis sanitaria sin precedentes, pero también ante una crisis social y económica de enormes dimensiones. Para afrontar dicha crisis exigen a Gobierno central y a todas las administraciones que se refuercen los servicios públicos que en los últimos años se han visto precarizados y que se reviertan los procesos de recortes y privatización que han sufrido.